miércoles, 13 de mayo de 2015

Secretos.

Voy a hacerlo. Cuando sean mayores, voy a hacerlo. Les contaré uno a uno todos mis secretos y cómo me enamoré de ti aquel enero mientras que tú te marchaste antes de llegar el verano. También les hablaré de tu forma de despertar o de secar mis lágrimas cada vez que salían a pasear, suave, con la punta de los dedos como si fueran tesoros que guardar en un frasco de cristal. Recordaré con una sonrisa todas y cada una de las medias que llevabas cuando ibas de mi mano y ese gesto tan tuyo al sentarte cansada en la cama y ponerte unos calcetines antes de ir a dormir, aunque a mí me gustase más acostarme sin ellos y levantar tu pantalón en mitad de la noche para rozar tu tobillo desnudo mientras que tú no te dabas ni cuenta. Me pondré melancólica al recordar las habitaciones de hotel contigo durmiendo en mi pecho mientras yo leía con las luces casi apagadas y, a cada página que pasaba, me quedaba mirando tu rostro calmado como si fuese mi hogar y tú mi único refugio. Sacaré las fotos de las ciudades que conocimos juntas y prometeré llevarlos algún día aunque mi corazón empiece a doler solo de pensarlo. Cuando ya no pueda mantenerme serena, me levantaré con la excusa de buscar ese libro de la estantería que aun guarda todas y cada una de las notas que escribiste para mí y les diré que eso era lo que te hacía especial, además de tener la sonrisa más bonita del mundo. No te preocupes, no les contaré solo lo bueno, también les hablaré de tu forma de hacerme pedazos, de todos esos agujeros que hiciste en mi interior y que aún sangran, de los atardeceres que me robaste. Prometo enseñarles una foto mía para que comparen mis ojos antes y después de ti, porque es cierto que hubo un tiempo en el que brillaban y sonreían como si el mundo fuese bonito y yo no tuviese ninguna preocupación más allá de pensar qué tipo de flor te regalaría en nuestro aniversario o cuándo te llevaría a París. En definitiva, les contaré todo. Incluyendo lo que siempre he tenido miedo de confesar; pase lo que pase, siempre deseé y sigo deseando que ellos tuviesen tu sonrisa.